Seguidores

Page copy protected against web site content infringement by Copyscape

Translator

22 mayo 2005

Después del incendio

Las cenizas del roble
quedaron intactas
del viento que roza
de la lluvia que inmola
en tu faz
a la intensa sonata del agua.

Fuiste ave
que pobló sus ramas
creciste vacía
con alas plateadas.

¿Hacia dónde te diriges ahora,
de dónde fue que viniste?

Esparcido en el suelo
te observo a lo lejos
no escucho tu canto
tu voz es silencio
que recae insaciable
como promesa del viento.

3 comentarios:

Rubria Morán dijo...

Todos somos, fuimos y seremos aves....

Rubria Morán dijo...

saluditos hidrocalidos ;)

Román Ahuí dijo...

Muchas gracias. Igualmente. Nos seguimos leyendo. Saludos cálidos, para aguas namás por allá.