Cómo me encantas cuando existes
anesteciando estas lentas madrugadas
rozo el tiempo con los dedos
lazo el humo por los huecos
adivino mis labios en tus besos.
Y todos los recesos de tu boca extasiada.
Vuélvete hora de minutos que plaguen de intensidades los segundos.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario